Más de 21 mil pensionados en la región de Arica y Parinacota se verán beneficiados con la nueva ley de Reforma de Pensiones
La reforma previsional despachada propone la creación de un Seguro Social que entregará dos prestaciones, el Beneficio por Año Cotizado y la Compensación a Mujeres por las mayores expectativas de vida.

Tras más de dos años de discusión, el Congreso Nacional despachó a ley este miércoles la reforma previsional presentada por el gobierno del Presidente Gabriel Boric, luego de la Cámara de Diputadas y Diputados, en tercer trámite constitucional, aprobó la iniciativa por 110 votos a favor, 38 votos en contra y ninguna abstención.
Posteriormente, la Sala de la Corporación realizó 105 votaciones por separado del articulado, las que fueron aprobadas sin modificaciones respecto de cómo se despachó desde el Senado.
En esta instancia la ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, agradeció el respaldo de las y los diputados a la reforma y señaló que “se ha podido dar un paso importantísimo, un paso muy relevante. Hemos dicho en los días anteriores que esto ha sido una tarea muy difícil, ponerse de acuerdo es muy difícil, sobre todo, cuando uno cree que sus ideas, que las ideas propias son las correctas, son las que Chile necesita, pero escucharse, tener la decisión y la valentía de avanzar en un punto común, fue a lo que nos convocó el presidente Gabriel Boric”.
Por su parte la Seremi del Trabajo y Previsión Social Jennifer Lazo manifestó que, “Este es un importante logro para el país, es por esto que vamos a estar difundiendo los detalles del proyecto de ley, en particular, los beneficios y los plazos, sin embargo, lo que podemos decir hoy es que en nuestra región de Arica y Parinacota más de 21 mil pensionados se verán beneficiados con la Reforma de Pensiones, aumentando la PGU y sus pensiones”.
La Seremi agregó además que “Esta reforma es un gran avance para el país y se va a ver reflejado no sólo en la calidad de vida de los que hoy día están jubilados, sino que también en los del futuro”.
Cabe recordar que el Ejecutivo ingresó el proyecto de reforma de pensiones al Congreso en noviembre de 2022, siendo el tercer intento en diez años de reformar el sistema de pensiones. Luego, tras más de un año de discusión, la Cámara de Diputadas y Diputados, en primer trámite constitucional, despachó el proyecto al Senado en enero de 2024. Siete meses después, en agosto del año pasado, la Comisión de Trabajo de la Cámara Alta y con el respaldo de la Sala, acordó un mecanismo de discusión ad referendum que permitió alcanzar acuerdos en torno a diferentes temáticas de la iniciativa, que fueron reflejados con el ingreso de un grupo de indicaciones por parte del gobierno el 15 de enero. Posteriormente, el Senado despachó el proyecto a la Cámara de Diputados para su tercer trámite.
Contenido de la reforma
La reforma previsional despachada propone la creación de un Seguro Social que entregará dos prestaciones, el Beneficio por Año Cotizado y la Compensación a Mujeres por las mayores expectativas de vida.
También considera una nueva cotización de cargo del empleador de 7% de la renta imponible. Esta se sumará al 1,5% que ya aportan los empresarios al Seguro de Invalidez y Sobrevivencia (SIS), con lo que los empleadores totalizarán una cotización de 8,5% en beneficio del trabajador.
Ese total se distribuirá en 4,5% para capitalización individual, con el objetivo de fortalecer las pensiones futuras. El 4% restante será administrado por el Seguro Social y tendrá la siguiente composición: con 2,5% se cubrirá las contingencias del SIS —invalidez y sobrevivencia— y la Compensación a Mujeres por mayores expectativas de vida. Con la diferencia de 1,5% se financiará el Beneficio por Año Cotizado, instrumento que mejorará las pensiones actuales y que será transitorio.
En cuanto a las características de los beneficios, la Compensación a Mujeres por la mayor sobrevida resultará en que una mujer y un hombre que se jubilan a los 65 años con la misma edad, mismo saldo, y grupo familiar obtengan la misma pensión, con un valor mínimo de 0,25 UF (aproximadamente $10.000 mensuales) para compensar esa diferencia.
Al Beneficio por Año Cotizado accederán las mujeres con al menos 10 años cotizados, umbral que permanecerá durante la primera década de vigencia de la prestación. Luego, ese requisito de acceso aumentará a 15 años cotizados. En el caso de los hombres, se beneficiarán aquellos con un mínimo de 20 años cotizados.
El alza de la nueva cotización de 7%, para alcanzar un 8,5%, se implementará con una gradualidad de 9 años. Esto podría extenderse en dos años en la medida que una evaluación externa sobre la Ley de Cumplimiento Tributario, que se efectuará al tercer año, dé cuenta de un menor efecto recaudatorio al esperado, conforme a las recomendaciones del Consejo Fiscal Autónomo.
La reforma, además, considera un aumento de la PGU a $250.000. La implementación será gradual. A los seis meses de publicada la ley, el nuevo monto lo recibirán los beneficiarios de PGU de 82 años o más; a los 18 meses de publicada la ley, lo recibirán los beneficiarios de 75 años o más; a los 30 meses de publicada la ley, el nuevo monto llegará a las personas de 65 años o más. Con igual gradualidad y cortes etarios accederán los beneficiarios de leyes reparatorias (Valech, Rettig y exonerados).
Por otro lado, la iniciativa incluye cambios regulatorios a la industria previsional, que derivarán en más transparencia y competencia, con menores costos para las personas. Por ejemplo, se establece la licitación del stock de afiliados, proceso que se efectuará cada dos años y en los cuales se licitará, aleatoriamente, al 10% de los afiliados actuales. El proceso será adjudicado al oferente con la menor comisión, la que deberá mantener por cinco años. Los afiliados podrán desistir o cambiarse de inversor en cualquier momento.
Las AFP tendrán la posibilidad de subcontratar las funciones de soporte, entre los cuales podrá actuar el Instituto de Previsión Social (IPS). Además, deberán reportar separadamente las funciones de soporte y administración de cuentas.
Asimismo, la reforma considera diversas medidas para incrementar la densidad de cotizaciones. Entre otras, la ampliación del Seguro de Lagunas Previsionales, el reemplazo de los multifondos por los fondos generacionales, modelo que busca maximizar la rentabilidad y acotar riesgos. También, un sistema de cobranza previsional centralizado, que permitirá una recuperación más eficiente de las cotizaciones impagas. Dicho sistema se licitará y podrá participar la Tesorería General de la República.
Este proyecto debe ir ahora a control preventivo al Tribunal Constitucional.