Programa Residencia Estudiantil aporta nuevos profesionales para Arica
La iniciativa ejecutada por la Municipalidad de Arica y financiada por la Junaeb, aumentó de 45 a 94 alumnos inscritos.
A veces lo que parece imposible de alcanzar, con amor y cariño se hace realidad. Y las distancias, por muy largas que sean, no son impedimento para que los sueños que nacieron en la ruralidad se vayan forjando al calor humano del Programa Residencia Estudiantil.
Los excelentes resultados obtenidos por las y los estudiantes provenientes de los valles y del altiplano, están a la vista. Las tutoras que abrieron las puertas de sus hogares están orgullosas de las metas obtenidas por esos jóvenes que con el apoyo de la “Muni” Arica y de la Junaeb egresaron de la universidad.
Además, por primera vez en su historia, el Programa Residencia Estudiantil aumentó notablemente su número de beneficiarios. El año 2023 registró 45 inscritos y este año la cantidad subió a 94 alumnos inscritos, 48 de enseñanza superior, 37 de enseñanza media y 9 de enseñanza básica.
Salto exponencial
“Este es un salto exponencial muy grande. Jóvenes egresados me contaron que, sin este programa, era imposible que ellos hubiesen podido estudiar, ya que no podían viajar a Arica todos los días desde los valles o desde los pueblos del altiplano”, dijo el alcalde Gerardo Espíndola.
En un inolvidable año 2023, egresaron de la carrera de kinesiología Vidal Tusco Ramírez y Magali Mamani Canqui. Mientras Noemi Condori Huarachi egresó de educadora de párvulo, Allison Blanco Pareja de trabajadora Social, Cristian Ramírez Contreras de diseñador multimedia y Angelica Apata Chuquichambi de técnico en nivel superior de gestión de control y logística.
Con todo el corazón
Vidal cuenta que cuando llegó a Arica no conocía a esas mujeres que hoy les dice tía Silvia y tía Sonia. “Ellas fueron mis dos tutoras dentro del programa. Y les agradezco con todo el corazón porque me trataron como un niño que era parte de su familia. Y eso significó un importante apoyo moral para que siguiera estudiando y pudiera terminar la universidad”.
La tutora Lidia Contreras Chuquichambi, con 12 años realizando esta hermosa labor, dijo que “es bonito poder ayudar a una persona que tiene ganas de estudiar, y que logra cumplir con la meta de sacar adelante una carrera universitaria.
Potente mensaje
A las personas que deseen cumplir esta importante tarea, Lidia les aconsejó hacerlo “de todo corazón”. Y les envió este mensaje con conocimiento de causa, porque Lidia en su niñez, también fue acogida en una residencia estudiantil.
“Para nosotros es muy importante reconocer a estos alumnos que han pasado por distintos procesos familiares. Sobre todo, en nuestros pueblos originarios, y que les ha costado un poco más el educarse”, comentó la directora regional de la Junaeb, Romina Carvajal.
